Existen varios tipos de incontinencia urinaria. Una de ellas se denomina «incontinencia urinaria de esfuerzo» y como su nombre lo dice, es aquella que se presenta asociada a algún esfuerzo como toser o estornudar.
Este tipo de incontinencia, habitualmente, requiere un procedimiento quirúrgico, razón por la cual muchas mujeres toman la decisión de aplazar el tratamiento.
Pero existen tres puntos importantes que se deben de considerar para tomar la decisión de una cirugía y así disminuir la angustia por la misma.
- La cirugía actual para el tratamiento de la incontinencia urinaria de esfuerzo es de mínima invasión. Esto se traduce que solo se realizan dos pequeñas incisiones de 3 mm en cada ingle (si tomamos en cuenta la técnica más comunmente realizada).
- La recuperación es asombrosa, ya que muchas veces el procedimiento se realiza de forma ambulatoria, disminuyendo el dolor post-operatorio y favoreciendo rapidamente la incorporación a las actividades habituales.
- La tasa de éxito en mujeres bien seleccionadas es hasta el 98%.
Dadas estas condiciones, sugiero que no sufras más. Si eres candidata a este tipo de procedimiento, no lo dudes. Acaba con la incontinencia en 40 minutos (tiempo habitual para este tipo de cirugía). ¿Tienes incontinencia? Déjanos tus datos aquí